Julieta Castellanos es una socióloga hondureña y actual rectora de la Universidad Autónoma de Honduras desde 2009. Ha hecho campaña contra la violencia en Honduras, centrándose en los cárteles de la droga y en la corrupción de la policía. Fundó el Observatorio de la Violencia en la UNAH y fue miembro de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación. Ha sido considerada por la revista Forbes y la revista Foreign Policy como una de las mujeres más influyentes de Centroamérica.

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Es una socióloga hondureña y actual rectora de la Universidad Autónoma de Honduras (UNAH) desde el año 2009. Castellanos ha hecho campaña contra la violencia en Honduras, centrándose en los cárteles de la droga y en la corrupción de la policía. Ha abogado tanto por la reforma judicial como por la reforma policial. Fundó el Observatorio de la Violencia en la UNAH, centro que recoge datos y analiza la violencia que azota a la república de Honduras. También fue miembro de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, encargada de aclarar los hechos relacionados con el golpe de Estado de 2009 que derrocó al presidente Manuel Zelaya.

Ha sido considerada por la revista Forbes y la revista Foreign Policy como una de las mujeres más poderosas de Centroamérica.

Julieta Castellanos Ruiz nació en San Francisco de Becerra, Olancho, el 8 de enero de 1954, siendo sus padres Rafael Castellanos, de Santa Bárbara, y Ernestina Ruiz, de Olancho. Ella creció en los campos de azúcar de la Honduras rural. Realizó sus estudios de Sociología en la Universidad de Costa Rica, y Maestría en Economía en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).

Se desempeñó como Presidente de la Asociación de Profesores del Centro Universitario de Estudios Generales (CUEG) en 1986, Coordinadora del Observatorio de la Violencia desde 2005, Consultora de la Fundación Arias para el Progreso Humano, Consultora de la Oficina de Washington para América Latina WOLA e Investigadora Asociada del Centro de Documentación de Honduras CEDOH, entre otros cargos.

Castellanos es autora de diversos libros y ensayos, y se ha destacado por su aporte a la docencia y a la generación del conocimiento en el país. Entre sus obras destacan: Violencia y reforma policial en Honduras (2013), Política y desarrollo en Honduras (2006) y Corrupción y transparencia en Honduras (2002).

El período de cuatro años de Julieta Castellanos como rectora de la UNAH finalizó en abril de 2013; sin embargo, quedó como rectora interina por un período de dos meses mientras se eligió al próximo titular de la universidad y manifestó su deseo de presentar su candidatura para un nuevo período. La Junta de Dirección Universitaria (JDU) acordó su reelección para el periodo 2013-2017, cargo que asumió a partir del 25 de septiembre.

Julieta Castellanos ha sido firme en mantener una universidad laica en la que no haya interferencias religiosas ni privilegios para los practicantes de cualquier religión, así como para evitar la discriminación hacia personas que pertenezcan a religiones minoritarias o externas al país.

Su lucha contra la violencia y la corrupción

Castellanos ha sido defensora de la reforma policial y de las medidas para frenar los crímenes violentos en Honduras.

Presionó para que una comisión internacional supervisara la limpieza de la policía nacional, una idea que fue aprobada por el Congreso Nacional. Castellanos también ha sopesado la política de armas en Honduras, pidiendo a las fuerzas armadas hondureñas que destruyan armas de fuego ilegales, incluyendo los AK-47.

En octubre de 2011, su hijo de veintidós años fue secuestrado y asesinado por la policía nacional de Honduras. El incidente llamó la atención por el grado de corrupción dentro de la policía hondureña. Castellanos pidió el fin de la ayuda externa a la policía y al Ejército hondureño, exigiendo que «dejen de alimentar a la bestia».

Julieta Castellanos dijo en una entrevista: «Voy a continuar esta lucha aunque pierda mi vida en el camino».

Un antiguo miembro del cuerpo docente y compañero suyo dijo que el estilo de Castellanos era exigir la acción sin importar el coste. «Es una especie rara en un país como Honduras».